Día Mundial por el Trabajo Decente

 

El 7 de octubre se hace un reconocimiento a la apuesta internacional de los actores del mundo del trabajo por el logro de vidas dignas para los trabajadores del mundo y sus familias, a partir de la implementación del trabajo decente.

Cualquier persona en el mundo debería poder llevar una vida digna y tener cubiertas sus necesidades básicas. El empleo es un factor crucial para lograrlo. Es por ello que habría que instar a todos los gobiernos a hacer más respecto a la creación de empleo.

El trabajo decente, en tanto que concepto y que programa, fue introducido y promovido inicialmente por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en 1999.

Según el concepto definido por la OIT y adoptado por la comunidad internacional, el trabajo decente es un trabajo productivo para hombres y mujeres en condiciones de libertad, equidad, seguridad y dignidad humana. El trabajo decente implica oportunidades de trabajo productivo y con un ingreso justo; proporciona seguridad en el lugar de trabajo y protección social para los trabajadores/as y sus familias; ofrece mejores perspectivas para el desarrollo personal y favorece la integración social; da a las personas libertad de expresar sus opiniones, organizarse y participar en la toma de decisiones que inciden en sus vidas; y garantiza la igualdad de oportunidades y de trato para todos y todas.