Cuando
hace calor, trabajar puede resultar bastante
incómodo o incluso agobiante, especialmente si
no corre el aire y si además, la humedad del
ambiente es alta.
En
algunos procesos de trabajo que requieren o
producen mucho calor (trabajos con hornos,
fundiciones, etc.) o en actividades donde se
realiza un esfuerzo físico importante, o donde
es preciso llevar equipos de protección
individual, las condiciones de trabajo pueden
provocar algo más serio que la incomodidad por
el excesivo calor y originar riesgos para la
salud y seguridad de los trabajadores. En
ocasiones especialmente graves pueden llevar a
la muerte.
Con los
fuertes calores del verano en nuestro país,
especialmente al mediodía y teniendo en cuenta
que se espera que aumenten las olas de calor
debido al cambio climático, esta amenaza se
extiende a muchos más tipos de trabajos y
condiciones. Sobre todo se hace especialmente
peligrosa en los trabajos al aire libre.
El
calor es un peligro para la salud porque nuestro
cuerpo, para funcionar con normalidad, necesita
mantener invariable la temperatura en su
interior en torno a los 37 o C. Cuando la
temperatura central del cuerpo supera los 38º C
ya se pueden producir daños a la salud y, a
partir de los 40,5º C, la muerte.
¿Qué es el estrés
térmico por calor?
El
estrés térmico por calor es la carga de calor
que los trabajadores reciben y acumulan en su
cuerpo y que resulta de la interacción entre las
condiciones ambientales del lugar donde
trabajan, la actividad física que realizan y la
ropa que llevan. Es decir, el estrés térmico por
calor no es un efecto patológico que el calor
puede originar en los trabajadores, sino la
causa de los diversos efectos patológicos que se
producen cuando se acumula excesivo calor en el
cuerpo.
Al
trabajar en condiciones de estrés térmico, el
cuerpo del individuo se altera. Sufre una
sobrecarga fisiológica, debido a que, al
aumentar su temperatura, los mecanismos
fisiológicos de pérdida de calor (sudoración y
vasodilatación periférica, fundamentalmente)
tratan de que se pierda el exceso de calor. Si
pese a todo, la temperatura central del cuerpo
supera los 38º C, se podrán producir distintos
daños a la salud, cuya gravedad estará en
consonancia con la cantidad de calor acumulado
en el cuerpo.
¿Qué riesgos y
daños a la salud genera el estrés térmico por
calor?
El
estrés térmico por calor genera varios tipos de
riesgos que pueden originar diversos daños a la
salud. En algunas ocasiones estos riesgos pueden
presentarse muy rápidamente, de repente, y tener
desenlaces rápidos e irreversibles. La mayoría
de las veces las causas del estrés térmico son
fácilmente reconocibles y la posibilidad de que
se produzcan daños es igualmente fácilmente
previsible. En otras circunstancias, en las que
las condiciones ambientales no son extremas, el
estrés térmico por calor puede pasar inadvertido
y producir daños a los trabajadores.
-
El
exceso de calor corporal puede hacer que:
-
Aumente la probabilidad
de que se produzcan accidentes de trabajo
-
Se agraven dolencias
previas (enfermedades cardiovasculares,
respiratorias, renales, cutáneas, diabetes,
etc.)
-
Se produzcan las
llamadas “enfermedades relacionadas con el
calor”
¿Qué otros factores intervienen en los riesgos y
daños?
Además
del estrés térmico por calor, intervienen:
-
El tiempo de exposición (duración del trabajo):
si es largo, aun cuando el estrés térmico no
sea muy elevado, el trabajador puede
acumular una cantidad de calor peligrosa.
-
Factores personales: falta de aclimatación al calor,
obesidad, toma de medicamentos, mala forma
física, consumo de alcohol, drogas y exceso
de cafeína o haber sufrido con anterioridad
algún trastorno relacionado con el calor.
¿En qué trabajos puede ser peligroso el estrés
térmico por calor?
o
donde el calor y la
humedad sean elevados debido al proceso de
trabajo o a las condiciones climáticas de la
zona y la ausencia de medios para reducirlos
o
donde, sin ser el calor
y la humedad ambiental elevados, se realice una
actividad física intensa o donde los
trabajadores lleven trajes o equipos de
protección individual que impidan la eliminación
del calor corporal.
-
En trabajos al aire libre. El estrés térmico
y sus consecuencias pueden ser especialmente
peligrosos en los trabajos al aire libre,
como en la construcción, agricultura, etc.,
ya que en ellos, al tratarse de una
situación peligrosa que fundamentalmente se
da en los días más calurosos de verano, no
suele haber programas de prevención de
riesgos como en el caso de los trabajos
donde el estrés por calor es un problema a
lo largo de todo el año.