El ruido de cierta intensidad produce múltiples efectos en las personas expuestas al mismo.
A día de hoy, este problema se ha agravado debido a la creciente actividad industrial, la mecanización de los procesos productivos así como una mayor utilización de vehículos a motor.
Estos factores han contribuido directamente a que el número de trabajadores expuestos sea muy superior a décadas anteriores, dónde solamente trabajadores de algunos sectores muy concretos se veían afectados por este riesgo.
En la actualidad, si tenemos en cuenta además la contaminación acústica en el ámbito laboral, social y familiar, podríamos deducir que la mayoría de la población tiene probabilidad de sufrir alguno de los efectos de la exposición al ruido, pero ¿de qué efectos estamos hablando?...
Efectos en la audición
Son efectos medibles cuantitativamente o cualitativamente realizando diferentes pruebas audiométricas.
Se caracterizan porque en una primera fase de fatiga auditiva pueden ser reversibles con descanso auditivo y/o cese de la exposición pero si por el contrario, la exposición es crónica y continuada a elevados niveles de ruido puede llegar a producir sorderas irreversibles.
Estos efectos pueden diagnosticarse como:
Pérdidas de audición
La forma más común de clasificar la pérdida auditiva es según el grado de pérdida pudiendo presentarse como una hipoacusia ligera, media severa o profunda.
Sorderas profesionales Originadas por la exposición a ruido elevado de una forma crónica. Dicha lesión va a estar condicionada por las características del ruido, del ambiente laboral y del trabajador expuesto.
Dentro de las sorderas profesionales hay que distinguir:
· Lesiones de tipo anatómico, en las que las células sufren cambios degenerativos.
· Aparición de otros síntomas como: zumbidos en oídos, dolores de oídos, vértigos, diploacusia, …
Presbiacusia
Es la sordera que aparece con el paso de los años a causa del envejecimiento biológico del sistema auditivo.
Pérdida Temporal
Elevación pasajera del umbral auditivo inducida por la exposición a ruido y que se va recuperando gradualmente una vez que ha cesado la exposición.
Efectos no auditivos
Efectos fisiológicos
El ruido actúa principalmente en el sistema nervioso central, sistema cardiovascular, glándulas endocrinas, aparato respiratorio, aparato digestivo, visión y sistema nervioso vegetativo.
Efectos psíquicos
· Molestias
· Reducción de la efectividad en trabajos mentales, de precisión, rápidos, trabajos psicomotores complejos y que requieren alto nivel de percepción
· Alteraciones en el estado de ánimo como disminución de la concentración, inquietud, malestar, falta de iniciativa, insomnio, …
· Alteraciones psicológicas como irritabilidad, astenia, susceptibilidad exagerada, agresividad, trastornos mentales, …
Para evitar tales efectos es necesario realizar acciones preventivas y de protección frente al ruido. Las medidas técnicas de control de ruido se podrían describir en función del objeto o agente al que vamos a aplicar la acción, de tal forma que podemos realizar:
· Acciones sobre la fuente sonora: sustitución de equipos de trabajo o procesos ruidosos, realizar un mantenimiento preventivo adecuado de la maquinaria, establecer procedimientos de control de ruido, …
· Acciones sobre el medio de propagación: planificación de espacios de trabajo, aislamiento acústicos de locales, instalación de cabinas, pantallas o barreras entre los focos de ruido y los receptores, …
· Acciones sobre el receptor: rotaciones del personal, uso de protectores auditivos, aislamiento del receptor en cabinas, …
La combinación de las diferentes acciones y un adecuado control del nivel de exposición de los trabajadores frente al ruido garantizarán un estado auditivo saludable de los trabajadores facilitando la comunicación entre emisores y receptores y evitando de este modo posibles accidentes.